Comencemos por definir ¿qué es el cambio? El cambio es el proceso que ocurre de un estado a otro. Los cambios son parte de nuestra vida, muchos de ellos son inevitables, ellos nos ayudan a crecer y aprender, por eso debemos hacer lo posible por ser receptivos en el momento en que se presenten. El cambio también nos ayuda a conocer todo el potencial que tenemos por dentro y que aún no conocíamos, por ejemplo, cuando tenemos que tomar la decisión de iniciar una carrera universitaria, cuando debemos mudarnos hacia otro lugar, cuando empezamos un trabajo, cada ejemplo puede generar una serie de sentimientos o emociones en particular, por lo regular generan estrés, ansiedad y miedo, porque simplemente vamos a experimentar algo nuevo para nosotros, es como cuando los niños comienzan a caminar, dando sus primeros pasos es normal que sientan miedo y prefieran estar agarrados de la mano de un adulto, también es normal que se tropiecen o se caigan cuando están empezando a caminar, después que aprenden, ¡no hay quien los detenga!
Existen algunas etapas que por lo regular las personas parecen pasar de manera similar mientras hacen el intento de realizar el cambio, estas etapas son aplicables en diversos procesos, se pueden observar en aquellos que desean bajar de peso así como también en aquellos que quieren tener un mejor estilo de vida. Dentro de estas etapas tenemos:
- La etapa de precontemplación: se considera que en esta etapa la persona aún no está “lista” para realizar el cambio, esto puede deberse a que la persona no ha dedicado el tiempo suficiente para pensarlo y convencerse, o todavía no tiene conciencia de que hay un problema o razón para cambiar. Un ejemplo de esta etapa sería: aquellas personas que tiene sobre peso; la manera en que las podemos ayudar es dándoles información sobre su situación, dándoles a conocer las consecuencias que eso tiene sobre su salud, autoestima, etc.
- Etapa de contemplación: aquí la persona está “insegura” de qué hacer, comienza a ver que existen aspectos positivos y otros menos positivos sobre su situación actual. Aquí la persona lucha con lo positivo y no tan positivo que puede estar acompañando el cambio; también pueden desear o rechazar la idea del cambio al mismo tiempo. Esta etapa a menudo es confusa y ambivalente.
- Etapa de preparación o determinación: luego de la lucha y la ambivalencia que tiene la etapa anterior, la persona comienza a considerar que hay más razones para cambiar que para dejar de hacerlo. La persona comienza a analizar y buscar opciones, hace un plan, y luego toma alguna acción para dejar el comportamiento dañino que traía y comienza a tener una conducta mas beneficiosa. Se puede observar en muchos casos, que la persona se siente más comprometida a realizar el cambio.